Conságrate a Jesús con esta oración muy efectiva de Sor Faustina

Dios eterno, la bondad misma, cuya misericordia no puede ser entendida por ninguna mente humana o angelical, ayúdame a llevar a cabo tu santa voluntad, como tú mismo me la haces saber. No deseo nada más que cumplir la voluntad de Dios. He aquí, Señor, tienes mi alma y mi cuerpo, la mente y mi voluntad, el corazón y todo mi amor. Acomódame de acuerdo con tus diseños eternos. Oh Jesús, luz eterna, ilumina mi intelecto e inflama mi corazón. Quédate conmigo como me lo prometiste, porque sin ti no soy nada. Sabes, oh Jesús mío, lo débil que soy, ciertamente no necesito decírtelo, porque tú mismo sabes muy bien lo miserable que soy. Toda mi fuerza reside en ti. Amén. S. Faustina