Consagrado a Nuestra Señora con esta oración

Oraciones de consagración personal a Nuestra Señora

Oh Inmaculada - Reina del cielo y de la tierra - refugio de los pecadores y mi madre muy amorosa - a quien Dios quería confiar la economía de su misericordia - a tus santos pies - Me postro ... ... ... ... ... ... rogándote que aceptes todo mi ser, como tu cosa y propiedad. - Te ofrezco todo mi ser - y toda mi vida: - todo lo que tengo - todo lo que amo - todo lo que soy: mi cuerpo, - mi corazón - mi alma - Déjame entender - la voluntad de Dios sobre mi - Permíteme redescubrir mi vocación como cristiano, - ver su inmensa belleza - y sentir los secretos de tu amor. - Les pido que sepan acercarse, más y más, a su Apóstol y modelo, el Padre Kolbe, para que su doctrina y testimonio puedan sacudir las fibras profundas de mi voluntad y mi corazón, para seguir fielmente sus pasos. - y conviértete en una guía para muchas almas - y todas las traen a Dios - a través de Tu Inmaculado y afligido Corazón. Amén.
¡Inmaculado Corazón de María, me consagro a ti!

Oh Virgen y Madre, confiando en tu Inmaculado Corazón,
Me consagro enteramente a Ti y, a través de ti, al Señor con tus propias palabras:

He aquí la sierva del Señor, hazme según tu palabra, tu voluntad, tu gloria.

Oh Virgen Inmaculada, Madre Mía, María, renuevo hoy y para siempre.
la consagración de todo yo para disponer de mí para el bien de las almas.

Solo te pido, oh Reina mía y Madre de la Iglesia, que cooperes fielmente en tu misión.
por la venida del Reino de Jesús en el mundo.
Por eso te ofrezco, oh Inmaculado Corazón de María, las oraciones, las acciones, los sacrificios de este día.

Maria mi Madre me entrego y me consagro enteramente a Ti.
Te ofrezco mi mente, mi corazón, mi voluntad, mi cuerpo, mi alma, todo de mí mismo.
Como soy tuya, querida Madre, te pido que Tu Inmaculado Corazón sea para mí.
salvación y santificación
Te pido nuevamente que me hagas, en tu gran misericordia, un instrumento de salvación para las almas.

Que así sea.