Devoción al protector de la Virgen del Monte Berico en tiempos de peste

Novena durante la enfermedad
Madonna del Monte Berico, Novena - Intercesora y protectora en tiempos de peste

Oh Santísima Virgen, Madre de Dios y Madre María, les agradezco por haberse dignado a aparecer en Monte Berico y les agradezco por todas las gracias que otorgan aquí a quienes se vuelven hacia ustedes. Nadie te ha rezado en vano. También te pido y rezo con la Pasión y la Muerte de Jesús y con tus dolores: dame la bienvenida, oh Madre misericordiosa, bajo tu manto, que es un manto materno; concédeme la gracia particular que te pido [protección y curación del Coronavirus para todos los miembros de nuestras escuelas e iglesias católicas en la Arquidiócesis de Denver, y todos los ciudadanos de nuestra ciudad, estado, nación y mundo] y protégeme de todo mal y especialmente del pecado, que es el mayor mal.

Oh, María, Madre mía, que siempre disfruto de tu protección amorosa en la vida y aún más en la muerte y luego vengo a verte al paraíso y a agradecerte y bendecirte para siempre. Amén.

Virgen del Monte Berico, ruega por nosotros.

Oh dulce Virgen, piadosa madre de amor,
como este Ave que se eleva desde el corazón.
Ave, Ave, Ave María
Ave, Ave, Ave María

Oh Virgen, brilla como una estrella en el cielo
defiende a tus hijos fieles maternalmente.
Ave Ave Ave Maria
Ave, Ave, Ave María