Devoción de hoy: oración para agradecer a Dios por el regalo de la familia.

Gracias señor por la familia

Señor, te damos gracias porque nos has dado esta familia: gracias por tu amor que nos acompaña, por el afecto que sostiene nuestras relaciones en el viaje de cada día; Gracias por llamarnos para ser un regalo y riqueza en nuestra comunidad cristiana y en la sociedad.

Haznos perseverantes en el amor, libres de dinero y codicia por la posesión, humildes y mansos en la relación con todos.

Haznos felices en la esperanza

fuerte en tribulación,

perseverando en la oración,

solícito por las necesidades de los hermanos,

considerado en la hospitalidad.

Haz de nuestro amor la semilla de tu Reino. Mantenga en nosotros una profunda nostalgia por usted hasta el día en que podamos, junto con nuestros seres queridos, alabar su nombre para siempre.

Amén.

Esta familia te bendice, Señor.

Él te bendice porque nos uniste, porque nos diste amor y alegría para vivir juntos, porque nos diste un propósito para continuar.

¡Esta familia te bendice, Señor!

Él te bendice porque nos das paciencia, y con dolor nos das la fuerza para esperar, porque no te pierdas el trabajo y el pan.

¡Esta familia te bendice, Señor!

Magnificat de la familia

Nuestra alma magnifica al Señor, y nos regocijamos en Dios nuestro Salvador. Dirigió su mirada a la pobreza de nuestro amor. Ahora todos podrán ver su poder que transforma nuestro camino. El Señor ha hecho grandes maravillas por nosotros, ha llenado nuestras vidas con bienes: nos ha dado una familia en la que crecer, ha puesto guías sabios y alegres a nuestro lado, nos ha hecho encontrarnos con amigos sinceros. Su misericordia nos libera de la debilidad, su perdón vence la estrechez mental del corazón. Su Palabra ilumina la incertidumbre de nuestros pasos. Él sostiene nuestra esperanza, nos ofrece una comunidad en la que podemos servir. Grande es el Señor que nos ha dado este amor y permanecerá como testigo de nuestra unión, para que sea fuerte, fiel y fructífero. No nos dejará solos. Nuestra alma magnifica al Señor, nuestro Salvador.

Amén.