El hombre que creó un gran banco de alimentos independiente comienza cada mañana con estas inspiradoras palabras
Incluso la muerte de su esposa y socio no puede evitar que Don Gardner sirva a los demás.
Don Gardner es un hombre verdaderamente extraordinario. El inglés se despierta por la mañana y sus primeros pensamientos son cómo puede ayudar a los demás. Mientras comparte una entrevista con BBC2, comienza su día orando: "Por favor, Señor, ayúdame a hacer una diferencia para alguien hoy". Su voz se quiebra cuando lo dice, lo que demuestra su profundo deseo de servir a los demás.
Junto con su esposa Jen, Don fundó el primer banco de alimentos independiente de Cornwall. Food proporciona 14.000 comidas al mes a 400-500 familias que utilizan el servicio. En la entrevista con Simon Reeve, el Don explica que algunas familias piden comida que no necesita cocinar, ya que no tienen dinero para pagar la energía necesaria para cocinarla.
La situación es angustiosa y se agrava aún más debido a las pérdidas económicas sufridas durante la pandemia. Sin embargo, con la ayuda de 74 voluntarios, el equipo está brindando un apoyo muy necesario a la comunidad.
Si bien el entrevistador describe los esfuerzos del banco de alimentos como abrumadores y humillantes, hay aún más en la historia de este hombre verdaderamente desinteresado ...
La esposa de Don, Jen, murió unos días antes de la entrevista. Su funeral sería al día siguiente. Sin embargo, Don quería compartir la historia con tantas personas como fuera posible. “Sé que a Jen le gustaría que le dijera a la gente ... el dolor, las privaciones, la preocupación constante de 'de dónde sacaré mi dinero la próxima semana'”, explica.
En su dolor, Don todavía quiere estar ahí para los demás. También mira hacia el futuro, preocupado por la ayuda adicional que las personas puedan necesitar durante los fríos meses de invierno. Hay algo increíblemente conmovedor en Don y su historia, así que tómate unos minutos para presenciar sus esfuerzos y quizás ofrece una oración por este nuevo viudo y su difunta esposa.
testimonio tomado de aleteia.org