Hoy, 13 de mayo, es la fiesta de Nuestra Señora de Fátima.

Nuestra Señora de Fátima. Hoy 13 de mayo es la fiesta de Nuestra Señora de Fátima. Fue en este día que la Santísima Virgen María comenzó su serie de apariciones a tres pastorcitos en el pequeño pueblo de Fátima en Portugal en 1917. Se apareció seis veces a Lucía, que entonces tenía 9 años, y a sus primos Francisco, que tenía 8 años en ese momento, y a su hermana Jacinta. , 6 años, cada 13 del mes entre mayo y octubre.

Hoy, 13 de mayo, es la fiesta de Nuestra Señora de Fátima: los Tres Niños

Hoy, 13 de mayo, es la fiesta de Nuestra Señora de Fátima: los tres hijos. Las vidas de los tres hijos de Fátima fueron completamente transformadas por las apariciones celestiales. Mientras cumplían los deberes de su estado con la máxima fidelidad, esos niños parecían ahora vivir sólo de la oración y el sacrificio, que ofrecían con espíritu de reparación para obtener la paz y la conversión de los pecadores. Se privaron de agua en períodos de mucho calor; le dieron el almuerzo a los niños pobres; llevaban gruesas cuerdas alrededor de la cintura que incluso hacían fluir la sangre; se abstuvieron de placeres inocentes y se exhortaron mutuamente a la práctica de la oración y la penitencia con un ardor comparable al de los grandes santos.

La Santísima Madre

La Santísima Madre llegó al pequeño pueblo de Fátima que se había mantenido fiel a la Iglesia Católica durante la reciente opresión del gobierno. Nuestra Señora vino con un mensaje de Dios para todos. Dijo que el mundo entero está en paz y que muchas almas van al cielo si sus peticiones son escuchadas y obedecidas. A todos los seguidores de su Hijo Jesús, oraciones por la paz en Rusia y en el mundo entero. Pidió reparación y conversión de corazones.

Que Nuestra Señora de Fátima nos cubra siempre con el manto de su protección maternal y nos acerque a Jesús, nuestra paz.

Oración a Nuestra Señora de Fátima

Oh Santísima Virgen María, Reina del Santísimo Rosario, Estuviste encantado de aparecer a los niños de Fátima y revelarles un mensaje glorioso. Te suplicamos, inspiremos en nuestro corazón un ferviente amor por el rezo del Rosario. Al meditar en los misterios de la redención que os son recordados, podemos obtener las gracias y virtudes que pedimos, gracias a los méritos de Jesucristo, nuestro Señor y Redentor.