Invocación a la Virgen para obtener protección poderosa

Bajo tu protección buscamos refugio, santa Madre de Dios: no desprecies las súplicas de los que estamos en juicio, y líbranos de todo peligro, gloriosa y bendita Virgen.
La bendita virgen maría

Consolador de los afligidos, ruega por nosotros. Ayuda de los cristianos, ruega por nosotros.

Concédeme alabarte, Virgen Santa, y me das la fuerza para luchar contra tus enemigos.

Mi madre, mi confianza, Virgen Madre de Dios, María, ruega a Jesús por mí.

Gloriosa reina del mundo, siempre Virgen María, tú que has generado a Cristo, Señor y Salvador, intercede por nuestra paz y salvación.

María, Madre de la gracia y Madre de la misericordia, protégenos del enemigo y danos la bienvenida a la hora de la muerte.

Ven en mi ayuda, Santísima Virgen María, en todas mis tribulaciones, angustias y necesidades: implorá por mí tu amado Hijo, porque él me liberará de todo mal y peligro del alma y el cuerpo.

Recuerda, oh Virgen María, que nunca se ha escuchado que alguien haya recurrido a tu patrocinio, rogado por tu ayuda, pedido tu protección y abandonado.

Apoyada por esta confianza, te suplico, Madre, Virgen de las vírgenes, y me humillo ante ti, un pecador arrepentido.

Madre de la Palabra de Dios, acepta mis oraciones y auspicioso escúchame. ¡Amén!