Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, escucha las oraciones y súplicas de todos sus hijos

Hoy hablamos de la Nuestra Señora del Perpetuo Socorro, título atribuido a María, siempre dispuesta a escuchar las oraciones y súplicas de todos sus hijos ya interceder para que la mirada de Dios se posa sobre ellos.

Madonna

La iconografía de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro representa la Madre de Dios con el Niño Jesús apoyada sobre su brazo izquierdo y con la cabeza inclinada hacia él, que la mira y se aferra a ella. En esta representación.

La historia de esta sagrada imagen se remonta a Siglo XIII, cuando lo encontramos en el Iglesia de San Matteo en Roma. Luego fue trasladado a la iglesia de la Redentoristas de Sant'Alfonso en Trastevere, donde fue muy venerado y aún se mantiene en pie.

Nuestra Señora del Perpetuo Socorro se hizo famosa por su Milagros, muchos de los cuales han sido registrados a lo largo de los siglos. Muchos fieles han buscado su ayuda e intercesión en momentos de necesidad, encontrando consuelo y alivio en sus oraciones.

Virgen maria

La leyenda de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro

La leyenda de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro es una de las historias más antiguas y fascinantes de la cristiandad. Se remonta al año 1495, cuando un rico comerciante romano llamadoy Giovanni Battista della Rovere tuvo una visión de la Virgen, quien le pidió que trajera su imagen de Creta a Roma. Nuestra Señora entregada a Juan el Bautista dos iconos milagrosa, una representaba la Madonna con el niño en brazos y el otro Jesús Crucificado.

El comerciante llegó a Roma y confió los iconos a la iglesia di San Mateo en Merulana, donde permanecieron hasta 1798. En ese año, los franceses invadieron Roma y la iglesia de San Matteo fue cerrada y saqueada. Dos monjes agustinos salvaron los iconos y los cuidaron.

Uno de los dos monjes, el padre Michele Marchi, vio a la Virgen en un sueño y le pidió que la llevara a un lugar seguro. Él la escuchó y con la ayuda de un amigo, entregó el icono a la iglesia de Santa María en Posterula para mantenerla a salvo.

Cuenta la leyenda que la Virgen se apareció en soñar a una mujer Romana y su hija, pidiendo que se construya una iglesia en su honor. La Virgen les habría prometido que sería protectora del pueblo romano para siempre y que siempre ayudaría a quienes la invocaran. Así, además de la culto de la Virgen, nació el de la Virgen del Perpetuo Socorro.