Las curaciones milagrosas de Nuestra Señora de las Lágrimas de Siracusa

Hoy queremos hablarte de curaciones milagroso por la Madonna delle Lacrime de Siracusa, reconocido por la comisión médica. En total hay alrededor de 300 y en este artículo te mostraremos algunas de ellas extraídas de un documento fechado en noviembre de 1953.

Virgen de las Lágrimas de Siracusa

La Madonna delle Lacrime de Siracusa es una estatua de la virgen maria de quien se dice que derramó lágrimas del 29 de agosto al 1 de septiembre de 1953. Este extraordinario acontecimiento atrajo la atención de numerosos fieles e hizo de la Madonna delle Lacrime uno de los principales lugares de culto del Sicilia y también de Italia.

la estatua es alta 61cm / XNUMX cm / XNUMX cm /XNUMX cm de diámetro y está hecho de yeso. Las lágrimas, que parecen brotar espontáneamente del rostro de la Madre de Dios, han sido objeto de una cuidadosa investigación científica. Excluyendo cualquier manipulación humana o artificial.

Testimonios de curaciones milagrosas

La primera persona que fue sanada fue Antonina Giusto Iannuso, el primero en ver también lágrimas. En su vida después de eso milagro No tuvo problemas con ninguno de sus embarazos.

Aliffi Salvatore fue curado sólo por intercesión de la Virgen 2 años por una neoplasia rectal y a partir de entonces vivió su vida como un niño normal.

oración

Monza Enza de 3 años, después de que le aplicaran un paño bendito, frente al cuadro de la Virgen, se recuperó completamente de la parálisis en el brazo derecho.

Caterina Ferracani, golpeado por trombosis cerebral quien le quitó la voz y lo clavó en una cama, después de la visita a la Virgen y la aplicación del algodón bendito, volvió a hablar.

Trancida Bernardo a los 38 se quedó paralizzato después de un accidente de trabajo. Un día, mientras estaba hospitalizado, escuchó a un hombre y una mujer hablar de los milagros de Siracusa. Siempre escéptico, dijo en tono de broma que sólo lo creería si fuera el paralítico que estaba en la sala. Luego la mujer le dio unos algodón bendito. Al día siguiente se recuperó por completo.

Anna Gaudioso Vassallo golpeado por un tumor maligno del recto ahora se había resignado a morir. Enviada a casa por varias luminarias, decidió ir a rezar a la Virgen mientras su marido aplicaba un trozo de algodón bendito en la zona enferma. Por la noche sintió una mano quitarle la curita. Sin decidir si volver a colocarlo, escuchó el nieta quien le dijo que había oído a la Virgen, decirle que había curado a su tía.