Las poderosas siete bendiciones santas para obtener gracias, liberación y curación

1. Bendíceme el poder del Padre Celestial + la sabiduría del Hijo divino + el amor del Espíritu + Santo. Amén.

2. Bendíceme crucificado Jesús, a través de su sangre más preciosa. En el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu + Santo. Amén.

3. Bendíceme Jesús desde el tabernáculo, a través del amor de su Corazón divino, en el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu + Santo. Amén.

4. Que María del cielo, la Madre y la Reina celestiales me bendigan y llenen mi alma de un mayor amor por Jesús, en el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu + Santo. Amén.

5. Bendice a mi ángel guardián, y que todos los santos ángeles vengan en mi ayuda para repeler los ataques de los espíritus malignos. En el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu + Santo. Amén.

6. Que mis santos patrones me bendigan, mi santo patrón del bautismo y todos los santos del cielo. En el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu + Santo. Amén.

7. Que las almas del Purgatorio y las de mi difunto me bendigan. Que sean mis intercesores en el trono de Dios para que pueda alcanzar la patria eterna. En el nombre del Padre + y del Hijo + y del Espíritu + Santo. Amén.

Que la bendición de la Santa Madre Iglesia, de nuestro Santo Padre el Papa Juan Pablo II, la bendición de nuestro Obispo ... ...

la bendición de todos los obispos y sacerdotes del Señor, y esta bendición, como se extiende por cada Sagrado Sacrificio del altar, desciende sobre mí todos los días, me protege de todo mal y me da la gracia de la perseverancia y un Santa muerte. Amén.

Estas hermosas bendiciones pueden invocarse tanto en uno mismo como en los demás al reemplazar el "desciende sobre mí" con el "desciende sobre ti o sobre ti" y los padres son fuertemente aconsejados sobre sus hijos y familiares que están enfermos y no.