CARTA DE MARY SS.ma PARA TI

Soy tu madre la Reina del Cielo y la Tierra pero frente a ti me convierto en una madre tierna, cariñosa y sedienta de tu amor. Mi hijo en el Gólgota me entregó a ti como madre y ahora ejerzo mi omnipotencia que Dios mi padre me ha otorgado como un gran amor hacia ti. No conoces mi dolor cuando vives lejos de mí. Me haces revivir el Calvario, vivo el Vía Crucis para ti y espero con los brazos abiertos que vengas a mí, mi amado hijo. Tu nombre está escrito en mi corazón, he sido inmaculado por ti, ya que tuve que generar el autor de la vida Jesucristo, pero todo fue hecho por ti, mi único amor y mi amado hijo. Cuando veo tus sufrimientos inmediatamente corro frente al trono del Padre a pedirte clemencia y gracias y él siempre me los concede porque amo con amor de madre y nada me puede separar de ti. Aunque vivas lejos de mí, me insultas, me maldices el corazón de mi madre siempre se vuelve hacia ti y nada puede separarnos, yo que soy tu madre, nunca me separo de ti. Guío tus pasos, camino a tu lado y muchas veces cuando te caes me levanto y te tomo de la mano aunque no creas en mí estoy a tu lado porque una madre que ama como yo nunca puede abandonar a un niño como tú aunque tus pecados son muchos, yo estoy contigo. Nunca pienses en mí lejos de ti me he hecho omnipotente para ayudar a cada uno de mis hijos que Jesús me ha dado y siempre voy en busca del hijo perdido, cubro las heridas de los niños rotos y me regocijo con los niños que aman. Siempre estoy presente en tu vida. Desde el primer día que naciste te tomé en mis brazos y hasta el último día vendré a recogerte para llevarte al Cielo conmigo. No temas mi hijo amado te ayudo, te ayudo, te bendigo, te amo, siempre estoy cerca de ti y cuando la vida se oscurece levanta la mirada al cielo, mira la estrella más grande del cielo estoy para decirte fuerza no temas para ti hay una madre en el cielo que te ama, no te abandona y te ama por la eternidad. Ahora hijo te bendigo, siempre estoy a tu lado, invocame, llámame, pide mi ayuda y yo como madre muevo los cielos a tu favor. No tendrás nada que temer hasta que tengas una madre como yo en los cielos. Como tu madre terrenal te sana y te nutre, así lo hago yo con tu alma hasta que brille con luz y llegue al cielo. Como madre, te bendigo y te digo “ama como te amo, mi amado hijo”.

DI PAOLO TESCIONE PROHIBIDA LA REPRODUCCIÓN CON FINES DE LUCRO