¿Qué le dijo Jesús a Santa Faustina Kowalska sobre el Fin de los Tiempos?

Nuestro Señor un Santa Faustina Kowalska, acerca de fin del tiempo, dijo: “Hija Mía, habla al mundo de Mi Misericordia; que toda la humanidad reconozca Mi insondable Misericordia. Es una señal del fin de los tiempos; entonces vendrá el día de la justicia. Mientras haya tiempo, acudan a la fuente de Mi Misericordia; aprovechar la sangre y el agua que corren por ellos”. Diario, 848.

"Prepararás al mundo para mi última venida". Diario, 429.

"Escribe esto: antes de que venga como Juez Justo, Vengo primero como Rey de la Misericordia". Diario, 83.

“Tú escribes: antes de venir como juez justo, primero abro de par en par la puerta de mi misericordia. Quien se niega a pasar por la puerta de Mi Misericordia, debe pasar por la puerta de Mi Justicia…”. Diario, 1146.

“Secretaria de Mi Misericordia, escribe, di a las almas de esta gran Misericordia Mía, porque el día terrible está cerca, el dia de mi justicia". Diario, 965.

“Antes del Día de la Justicia envío el Día de la Misericordia”. Diario, 1588.

“Extiendo el tiempo de la misericordia para los pecadores. Pero ¡ay de ellos si no reconocen este tiempo de Mi visita! Hija Mía, secretaria de Mi Misericordia, tu deber no es sólo escribir y proclamar Mi Misericordia, sino también implorar esta gracia para ellos, para que también ellos glorifiquen Mi Misericordia”. Diario, 1160

"Tengo un amor especial por Polonia. y, si es obediente a mi voluntad, lo exaltaré en poder y santidad. De ella saldrá la chispa que preparará al mundo para Mi venida final”. Diario, 1732

Palabras de la Santísima Virgen María, Madre de la Misericordia, a Santa Faustina): "... Debes hablarle al mundo de su gran misericordia y preparar al mundo para la segunda venida de Aquel que vendrá, no como Salvador misericordioso, sino como Juez justo. O, ¡qué terrible será ese día! Determinado es el día de la justicia, el día de la ira divina. Los ángeles tiemblan ante ella. Hablad a las almas de esta gran misericordia mientras aún es tiempo de conceder misericordia”. Diario, 635.