Milagro: sacerdote curado gracias a la intercesión de dos mártires

El P. Teodosio Galotta, un salesiano de Nápoles, estaba tan gravemente enfermo que sus familiares le habían preparado el nicho en el cementerio con la inscripción ya hecha.

El urólogo, dr. Bruno hizo este diagnóstico: cáncer de próstata con metástasis óseas y pulmonares, una próstata que ha aumentado de volumen, tiene una consistencia de madera y está bien redondeada.

El diagnóstico había sido confirmado por radiografías:

Alteración estructural del tercio proximal del fémur derecho y de las ramas isquiopúbicas, especialmente a la izquierda, para lesiones de tipo osteolítico. En campos pulmonares altos, especialmente a la derecha, presencia de nódulos neoplásicos meta estáticos.

Luego describiendo en detalle lo que se encontró, el radiólogo, el prof. Acampora, agregó: La alteración ocurre con la desaparición de la trabeculación ósea normal, reemplazada por áreas de osteólisis que se alternan con áreas de engrosamiento óseo, reproduciendo la imagen neoplásica típica del tipo osteoclástico y en parte osteoblástico. Posteriormente, se observó una fractura del pequeño trocánter derecho ...

El internista dr. Schettino, en su declaración escrita, había hablado, con ocasión de los dos colapsos periféricos graves, de condiciones físicas muy precarias y de una situación muy peligrosa para la vida del paciente. El forense, a su vez, después de examinar toda la documentación, dijo que era un diagnóstico preciso y no un sospechoso de diagnóstico o una declaración de probabilidad nosológica.

En la noche del 25-10-1976, Don Teodosio Galotta llegó a su fin: estaba casi en coma. El asistente, tocándose la muñeca, se deslizó: ya no se le escucha.

Don Galotta, quien aún entendió, al escuchar esto, invocó en su corazón a los dos mártires salesianos de China:

Obispo Versaglia y Don Caravario, ayúdenme.

Inmediatamente los dos mártires se le aparecieron y le dijeron:

No te preocupes, estamos ahí.

Al instante Don Galotta se recuperó por completo. La documentación médica se encuentra ahora en Roma en la Sagrada Congregación para las Causas de los Santos, para la beatificación de los dos mártires.