El misterio a los ojos de Nuestra Señora de Guadalupe inexplicable para la ciencia

El día sábado 9 de diciembre de 1531, Juan Diego partió temprano desde su aldea hacia Santiago Tlatelolco. Cuando pasó la colina del Tepeyac, lo golpeó una canción armoniosa de pájaros. Intrigado, sube a la cima y ve una nube blanca brillante rodeada por un arco iris.

En el apogeo del asombro oye una voz que lo llama cariñosamente, usando la lengua indígena, el "náhuatl": "¡Juanito, Juan Dieguito!" Y he aquí, vio a una bella dama ir hacia él y decirle: "Escucha, hijo mío, mi pequeño, Juanito, ¿a dónde vas?" Juan Diego responde: "Señora y mi pequeña, debo ir a su casa [templo] en México-Tlatilolco, para escuchar las cosas del Señor que nos enseñan nuestros sacerdotes delegados de Nuestro Señor". Entonces la Señora le dice: Conoce y ten en cuenta a ti, la menor de mis hijos, que yo soy la Virgen María, Madre del Dios verdadero para quien vivimos, del Creador que está en todas partes, Señor del Cielo y de la tierra. Tendrás mucho mérito y recompensa por el trabajo y esfuerzo con el que harás lo que te recomiendo. Mira, este es mi trabajo, hijo menor, ve y haz todo lo que puedas ". La Santísima Virgen le pide a Juan Diego que acuda al Obispo de la Ciudad de México, para comunicarle su deseo de que se construya una pequeña iglesia en ese cerro, desde donde ella daría ayuda y protección a todos los mexicanos.

Las 13 figuras en los ojos de la Virgen de Guadalupe

Revelan un mensaje de la Virgen María: ante Dios, hombres y mujeres de todas las razas son iguales.

Los ojos de Nuestra Señora de Guadalupe constituyen un gran enigma para la ciencia, como lo han señalado los estudios del ingeniero José Aste Tönsmann del Centro de Estudios Guadalupani en la Ciudad de México.

Historia
Alfonso Marcué, fotógrafo oficial de la antigua Basílica de Guadalupe en la Ciudad de México, descubrió en 1929 lo que parecía la imagen de un hombre barbudo reflejado en el ojo derecho de la Virgen. En 1951, el diseñador José Carlos Salinas Chávez descubrió la misma imagen mientras observaba una fotografía de la Virgen de Guadalupe con una lupa. También lo vio reflejado en su ojo izquierdo, en el mismo lugar donde se habría proyectado un ojo vivo.

Opinión médica y el secreto de sus ojos
En 1956, el médico mexicano Javier Torroella Bueno preparó el primer informe médico sobre los ojos de la llamada Virgen Morena. El resultado: como en cualquier ojo vivo, se cumplieron las leyes de Purkinje-Samson, es decir, hay un triple reflejo de los objetos ubicados ante los ojos de la Virgen y las imágenes están distorsionadas por la forma curva de sus córneas.

En el mismo año, el oftalmólogo Rafael Torija Lavoignet examinó los ojos de la Santa Imagen y confirmó la existencia en los dos ojos de la Virgen de la figura descrita por el diseñador Salinas Chávez.

Comience el estudio con procesos de digitalización.
Desde 1979, el doctor en sistemas computacionales y un graduado en Ingeniería Civil José Aste Tönsmann ha descubierto el misterio encerrado en los ojos de Guadalupe. A través del proceso de digitalización de imágenes por computadora, describió el reflejo de 13 personajes en los ojos de la Virgen Morena, basándose en las leyes de Purkinje-Sansón.

El diámetro muy pequeño de las córneas (7 y 8 milímetros) excluye la posibilidad de dibujar las figuras en los ojos, si se tiene en cuenta la materia prima sobre la que se inmortaliza la imagen.

Los personajes encontrados en las pupilas.
El resultado de 20 años de estudio cuidadoso de los ojos de Nuestra Señora de Guadalupe fue el descubrimiento de 13 diminutas figuras, dice el Dr. José Aste Tönsmann.
1.- Un indígena que observa
Aparece de cuerpo entero, sentado en el suelo. La cabeza del nativo está levemente levantada y parece mirar hacia arriba, en señal de atención y reverencia. Destacan una especie de círculo en la oreja y unas sandalias en los pies.

2.- Los ancianos
Después de que el indígena aprecia la cara de un anciano, calvo, con una nariz prominente y recta, ojos hundidos apuntando hacia abajo y una barba blanca. Los rasgos coinciden con los de un hombre blanco. Su marcado parecido con el obispo Zumárraga, tal como aparece en las pinturas de Miguel Cabrera del siglo XVIII, permite suponer que es la misma persona.

3.- El joven
Junto a los ancianos hay un joven con rasgos que denotan asombro. La posición de los labios parece hablar con el supuesto obispo. Su cercanía con él le hizo pensar que es traductor, porque el obispo no hablaba el idioma náhuatl. Se cree que es Juan González, un joven español nacido entre 1500 y 1510.

4.-Juan Diego
Se destaca la cara de un hombre maduro, con rasgos indígenas, barba escasa, nariz aguileña y labios entreabiertos. Tiene un sombrero en forma de papel de aluminio, comúnmente utilizado entre los nativos que en ese momento se dedicaban al trabajo agrícola.

Lo más interesante de esta figura es el manto que lleva anudado al cuello, y el hecho de que extiende el brazo derecho y muestra el manto en la dirección en la que se encuentra el anciano. La hipótesis del investigador es que esta imagen corresponde al visionario Juan Diego.

5.- Una mujer de raza negra
Detrás del presunto Juan Diego aparece una mujer con ojos penetrantes que mira con asombro. Solo se puede ver el torso y la cara. Tiene tez oscura, nariz achatada y labios grandes, rasgos que corresponden a los de una mujer negra.

El padre Mariano Cuevas, en su libro Historia de la Iglesia en México, indica que el obispo Zumárraga había otorgado la libertad en su testamento al esclavo negro que lo había servido en México.

6.- El hombre barbudo
En el extremo derecho de ambas córneas aparece un hombre barbudo con rasgos europeos que no ha podido identificar. Muestra una actitud contemplativa, el rostro expresa interés y perplejidad; mantiene la mirada fija en el lugar donde el nativo explica su manto.

Un misterio en el misterio (compuesto por figuras 7, 8, 9, 10, 11, 12 y 13)
En el centro de ambos ojos aparece lo que se ha denominado "grupo familiar indígena". Las imágenes son de diferentes tamaños que las demás, pero estas personas tienen las mismas dimensiones entre sí y componen una escena diferente.

(7) Una mujer joven con rasgos muy finos que parece estar mirando hacia abajo. Tiene una especie de tocado en el cabello: trenzas o cabello trenzado con flores. Sobre su espalda se encuentra la cabeza de un niño con un manto (8).

En un nivel inferior ya la derecha de la joven madre hay un hombre con sombrero (9), y entre los dos hay una pareja de niños (hombres y mujeres, de 10 y 11 años). Otro par de figuras, esta vez un hombre y una mujer maduros (12 y 13 años), están detrás de la joven.

El hombre maduro (13) es la única figura que el investigador no ha podido encontrar en ambos ojos de la Virgen, estando presente solo en el ojo derecho.

Conclusión
El 9 de diciembre de 1531, la Virgen María le pidió al nativo Juan Diego que construyera un templo en el cerro del Tepeyac para dar a conocer a Dios "y cumplir lo que desea mi mirada compasiva y misericordiosa (...)", Nican Mopohua n. 33)

Según el autor, estas 13 figuras juntas revelan un mensaje de la Virgen María dirigido a la humanidad: ante Dios, hombres y mujeres de todas las razas son iguales.

Los del grupo familiar (figuras 7 a 13) en ambos ojos de la Virgen de Guadalupe, según el Dr. Aste, son las figuras más importantes entre las que se reflejan en sus córneas, porque están ubicadas en sus pupilas, lo que significa que María Guadalupe tiene a la familia en el centro de su mirada compasiva. Podría ser una invitación para buscar la unidad familiar, para acercarse a Dios en la familia, especialmente ahora que esta última ha sido tan devaluada por la sociedad moderna.