Novena al Niño Jesús de Praga, cómo rezar

Jesús era pobre desde el momento de su encarnación. Se hizo hombre para enseñarnos a emular la virtud de la pobreza. Como Dios, todo lo que necesitaba estaba al alcance de la mano, pero eligió ser pobre. De hecho, Jesús no tenía dónde reclinar la cabeza porque pasaba las noches orando por el mundo entero al aire libre. Durante la Pasión su túnica se rasgó e incluso al morir ni siquiera tuvo sepulcro.

Nuestro Divino Maestro nos dice: "Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos".
Esto quiere decir que si estamos satisfechos con todo lo que tenemos en la vida, y nos resignamos a las disposiciones de la Divina Providencia hacia nosotros, no aferrándonos ni deseando desmesuradamente los bienes materiales, recibiremos la recompensa de la vida eterna.

Il Niño Jesús de Praga concédenos la gracia de ser pobres en espíritu para abundar en las riquezas espirituales de la eternidad.

Oremos…

Oh Santo Niño Jesús de Praga, míranos postrados a Tus pies implorando Tu bendición y Tu ayuda. Creemos firmemente en Tu bondad, en Tu amor y en Tu misericordia. También sabemos que cuanto más te honremos, más nos bendecirás. Recuerda que Tú nos has dicho que pidamos, busquemos y llamemos a la Puerta de Tu Infinita Misericordia. Así que es con la mayor confianza que hoy nos arrodillamos ante Ti. Enséñanos a pedir lo que podemos recibir; muéstranos cómo buscar lo que encontramos. Alégrate de escuchar mientras llamamos, oh Divino Niño Jesús, y abre tu amoroso Corazón a nuestra confiada súplica. Amén.

Oh María, Madre de Dios y Madre nuestra Inmaculada
Ruega a Jesús por nosotros.

Oración final

Oh Santo Niño Jesús, te damos gracias por todos los sufrimientos que has soportado en este mundo por nosotros. En tu nacimiento, un humilde pesebre fue tu cuna. Toda tu vida transcurre entre los pobres y es por ellos que se han realizado tus mayores milagros. Oh Príncipe de la Paz, Redentor de la humanidad, Hijo del mismo Dios, te encomendamos nuestras fervientes súplicas en esta Novena.

(Mencione aquí por qué ora).

Enséñanos a ser pobres de espíritu para recibir la bendita recompensa que prometiste.

Ilumina nuestras mentes, fortalece nuestra voluntad y enciende nuestros corazones con tu amor. Amén.

Santa Madre del Niño Jesús,
Intercede por nosotros.

Nuestro Padre …
AVE María …
Gloria al Padre ...

Niño Jesús, pobre y sencillo,
Acepte nuestras solicitudes.

En el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.