Oración al Sagrado Corazón de Jesús el primer viernes de mes

Oración del primer viernes del mes: el Sagrado Corazón de Jesús representa el amor divino de Jesús por la humanidad. La Fiesta del Sagrado Corazón es una solemnidad en el calendario litúrgico católico romano y se celebra 19 días después de Pentecostés. Dado que Pentecostés siempre se celebra en domingo, la fiesta del Sagrado Corazón siempre cae en viernes. Jesucristo se apareció a Santa Margarita Alacoque en el siglo XVII. Esta es una de las bendiciones que prometió a quienes practiquen la devoción a su Sagrado Corazón:

“En el exceso de la misericordia de mi Corazón, les prometo que mi amor todopoderoso lo concederá. Todos aquellos que recibirán la Comunión los primeros viernes, durante nueve meses consecutivos, la gracia del arrepentimiento final. No morirán en mi disgusto, ni sin recibir los sacramentos; y mi Corazón será su refugio seguro en esa última hora ”.

Esta promesa llevó a la piadosa práctica católica de hacer un esfuerzo por asistir a misa. Reciba la Comunión el primer viernes de cada mes. El primer viernes de cada mes está dedicado al Sagrado Corazón de Jesús. Esforcémonos por decir esta oración el primer viernes de cada mes en nuestros hogares o en la iglesia.

Oración del primer viernes

Sacratísimo Corazón de Jesús, en el día dedicado a honrarte, nos comprometemos una vez más a honrarte y servirte con todo nuestro corazón. Ayúdanos a vivir nuestra vida diaria con un espíritu de verdadera preocupación por los demás y una profunda gratitud hacia ti y hacia todos aquellos por quienes nos amas y sirves.

En medio de todas nuestras pruebas y tribulaciones, recordaremos que Tú siempre estás con nosotros, como lo estabas con los Apóstoles cuando su barco se agitó en la tormenta. Renovamos nuestra fe y confiamos en ti.

Nunca dudaremos de que Tú eres nuestro amigo, que siempre vive dentro de nosotros, caminando a nuestro lado cuando falla el coraje, iluminándonos cuando las dudas nublan nuestra visión de fe, protegiéndonos de las asiduas mentiras y engaños del maligno.

Señor Jesús, bendice a cada uno de nosotros, nuestras familias, nuestra parroquia, nuestra diócesis, nuestro país y nuestro mundo entero. Bendice nuestros trabajos, nuestros negocios, nuestro entretenimiento; que siempre procedan de tu inspiración.

En todo lo que hacemos y decimos, solo podemos ser canales del amor de Tu Sagrado Corazón para todas las personas que Tú traes a nuestro alcance para recibir Tu amor a través de nosotros. Consolar a los enfermos (mencionar nombres); los que sufren en el corazón o en la mente; los que tienen cargas y se rompen debajo de ellas (mencione el nombre).

Estas dos cosas, sobre todo, te pedimos hoy; conocer íntimamente y amar todo lo que ama tu Sagrado Corazón, absorber la actitud de tu Sagrado Corazón y expresarlo en nuestra vida.

Por último, recemos para que nuestra confianza en Ti sea cada vez más genuina, día tras día, y nuestra devoción a los designios del Sagrado Corazón, cada vez más comprometida. amén