Oración a Jesús Crucificado que libera, cura y santifica

Aquí estoy, mi amado y buen Jesús: en tu santísima presencia, postrado, te ruego con el fervor más ferviente para imprimir en mi corazón sentimientos de fe, esperanza, caridad, dolor de mis pecados y una propuesta para no ofenderte mientras yo Con todo amor y con toda compasión voy considerando tus cinco heridas, comenzando con lo que el buen profeta David dijo de ti, buen Jesús: "Mis manos y mis pies pasaron, ¡todos mis huesos contaron!" . Te adoro, oh Santa Cruz, que con los venerables miembros de Nuestro Señor Jesucristo, fueron adornados y rociados con Su Sangre más preciosa. Te adoro, Dios mío, colocado en ti y a ti, o Santa Cruz por su bien. Amén.

En unión con el Inmaculado Corazón de María, saludo y adoro la S. Plaga de tu mano derecha, oh Jesús, y pongo a todos los sacerdotes de tu S. Iglesia en esta Plaga. Dales, cada vez que celebran el Sacrificio, el Fuego de tu Amor divino, para que puedan comunicarlo a las almas que se les han confiado. Amén.

Gloria al Padre ...

Lo saludo y adoro la S. Plaga de tu mano izquierda, y pongo en ella a todos los que están en error y a todos los incrédulos, estas pobres almas que no te conocen. Por el bien de estas almas, envía a Jesús, muchos trabajadores a tu viña, para que encuentren el camino a tu Santísimo. Corazón. Amén.

Gloria al Padre ...

Lo saludo y adoro las sagradas heridas de tus pies sagrados, y pongo a todos los pecadores endurecidos que prefieren vivir para el mundo; Recomiendo especialmente a los que mueren hoy. No permitas, Jesús, que tu Preciosa Sangre se pierda por ellos. Amén.

Gloria al Padre ...

Lo saludo y adoro las S. Heridas de tu cabeza sagrada, y pongo en estas tus SS. Herir a los enemigos de la Santa Iglesia, a todos aquellos que aún te golpean hasta la muerte y te persiguen en tu cuerpo místico. Por favor, Jesús, conviértelos, llámalos como llamaste a Saúl para convertirlo en un San Pablo, para que pronto haya un rebaño de ovejas y un Pastor. Amén.

Gloria al Padre ...

Lo saludo y amo la S. Plaga de tus SS. Corazón, y en él pongo, Jesús, mi alma y todos aquellos por quienes quieres que ore, especialmente aquellos que sufren y sufren, todos los que son perseguidos y abandonados. Dales, o SS. Corazón de Jesús, tu luz y tu gracia. Llénalos con tu amor y tu verdadera paz. Amén.

Gloria al Padre ...

Padre celestial, te ofrezco, a través del Inmaculado Corazón de María, tu Hijo más amado, y yo con él, en él, a través de él, con todas sus intenciones y en nombre de todas las criaturas. Amén.