Oración contra la envidia, la malicia y los chismes ...

Señor, mi amado Dios, sabes cómo mi corazón se llena de miedo, tristeza y dolor, cuando descubro que me envidian y que otros quieren lastimarme. Pero confío en ti, Dios mío, Tú, que eres infinitamente más poderoso que cualquier ser humano.
Quiero poner todas mis cosas, todo mi trabajo, toda mi vida, todos mis seres queridos en tus manos. Te confío todo para que los envidiosos no puedan causarme ningún daño.
Y toca mi corazón con tu gracia para conocer tu paz. Porque de hecho confías en ti, con toda mi alma. Amén

Dios mío, mira a los que quieren lastimarme o faltarme al respeto, porque me tienen envidia.
Muéstrale la inutilidad de la envidia.
Toca sus corazones para mirarme con buenos ojos.
Cura sus corazones de la envidia, de sus heridas más profundas y bendícelos para que sean felices y ya no tengan que envidiarme. Confío en ti, Señor. Amén.

Protégeme, Señor, de las maniobras de los envidiosos, cúbreme con tu sangre salvadora más preciada, acércate con la gloria de tu resurrección, cuídame por la intercesión de María, y de todos tus ángeles y santos.
Haz un círculo divino a mi alrededor para que el rencor de los envidiosos no penetre en mi vida. Amén.

Señor, no quiero que el miedo a los envidiosos tenga poder sobre mí y me calme. Soy amado por ti y tengo la dignidad de ser el hijo de Dios.
Deseo vivir libre y pacífico. Reconozco que el orgullo me hace sufrir cuando los envidiosos me critican. Pero quiero ganarlo y conocer la libertad de un corazón simple y humilde.
Hoy quiero levantar la cabeza, Señor, y decidir caminar quieto, con dignidad, como tu amado hijo, como tú quieres que camine. Amén.