Oración a María, reina de la familia para obtener la gracia.

 

María, madre de Dios y nuestra madre, madre de ternura y amor, madre atenta, solidaria y fiel, madre de todo hombre entregado a ti en el momento extremo del sacrificio de tu hijo, llévanos, con tu ejemplo, a las calles de amor, que no necesita palabras, sino ojos atentos a las necesidades del otro.

Enséñanos, madre, a hacer todo lo que Jesús nos dice, permitiéndole entrar a nuestra casa de esposas, donde queremos vivir libres de nuestro egoísmo y no condicionadas por nuestra diversidad, pero disponibles para recibirnos y repetir nuestro sí todos los días.

Hacer que la diversidad se convierta en riqueza, que la crisis sea una oportunidad de crecimiento, que ir juntos no sea un obstáculo para la realización de nuestros proyectos personales, sino un incentivo para transformarlos en el plan de Dios.

Reina de la familia, guíanos a ser dóciles en la escucha, unidos en la oración, humildes en el servicio, para que nuestro hogar se convierta, como el de Nazaret, en un patio de santidad.

Amén