Oración a San Luigi Gonzaga para ser recitada hoy para pedir una gracia

I. Angelico S. Luigi, quien a pesar de haber nacido entre las comodidades y riquezas del mundo,
Con el ejercicio continuo de la oración, la retirada y la penitencia, has aspirado solo a los bienes del Paraíso,
obtienes toda la gracia de mirar siempre con desapego las comodidades de la vida actual,
para asegurar la alegría de la vida futura. Gloria al Padre ...

II Angelico S. Luigi, quien a pesar de nunca haber perdido su inocencia bautismal,
siempre mortificabas tu carne con los instrumentos más atormentadores y el ayuno más riguroso,
nos da la gracia de mortificar todos nuestros sentidos para que no nos causen
la pérdida del más preciado de los tesoros, que es la gracia de Dios. Gloria al Padre ...

III. Angelico S. Luigi, quien lloró con contrición tan vivo las más pequeñas imperfecciones de su infancia,
para desmayar a los pies del confesor en el acto de acusarlo, dénos la gracia de llorar con gran sinceridad
nuestras faltas, y acercarnos siempre con las disposiciones correctas al Sacramento de la Penitencia. Gloria al Padre ...

IV. Angelico S. Luigi, que necesita entretenerte con los mejores de tu tiempo y participar
para sus diversiones mundanas, siempre te has quedado con ellos con tanta reserva
para ser indicado por todos como un ángel en la carne, obtienes toda la gracia para despreciar el respeto humano
y conducir siempre una conducta edificante para los hermanos. Gloria al Padre ...

V. Angelico S. Luigi, quien llamó al estado religioso, entre todos los obstáculos que se le opusieron, se mostró firme y decisivo.
en tu santo propósito, y lo correspondiste tan bien como para servir de modelo para el más perfecto,
obtengan para nosotros toda la gracia de seguir siempre con fidelidad y corresponder exactamente al llamado divino,
Gloria al Padre ...

TÚ. Angelico S. Luigi, quien, consagrado al Señor con un voto irrevocable desde sus primeros años,
estabas tan unido a Dios que nunca te distraes en la oración, que nunca sufres tentaciones de impureza,
para mantenerse milagrosamente vivo entre los peligros del naufragio y el fuego, y ser siempre obtenido
todo lo que pediste en oración, obtienes toda la gracia para evitar cualquier cosa que pueda desagradar a Dios,
para que, constantemente protegidos por él, resistamos las tentaciones del enemigo y, creciendo en el camino de
justicia, venimos a merecer, contigo, la gloria en el cielo. Gloria al Padre ...