Oración de súplica a Nuestra Señora de Lourdes para pedir una gracia.

María, te apareciste a Bernadette en la grieta de esta roca.
En el frío y la oscuridad del invierno,
hiciste sentir la calidez de una presencia,
Luz y belleza.
En las heridas y la oscuridad de nuestras vidas,
en las divisiones del mundo donde el mal es poderoso,
trae esperanza
y restablecer la confianza!

Tú que eres la Inmaculada Concepción,
ven a ayudarnos pecadores.
Danos la humildad de la conversión,
El coraje de la penitencia.
Enséñanos a orar por todos los hombres.

Guíanos a las fuentes de la verdadera vida.
Haznos peregrinos en el viaje dentro de tu Iglesia.
Satisface el hambre de la Eucaristía en nosotros,
el pan del viaje, el pan de la vida.

En ti, oh María, el Espíritu Santo ha hecho grandes cosas:
en su poder, te trajo al Padre,
en la gloria de tu Hijo, viviendo para siempre.
Mira con el amor de madre
Las miserias de nuestro cuerpo y corazón.
Brilla como una estrella brillante para todos
en el momento de la muerte

Con Bernardetta, te rogamos, María,
con la simplicidad de los niños
Pon en tu mente el espíritu de las Bienaventuranzas.
Entonces podemos, desde aquí abajo, conocer la alegría del Reino
y canta contigo:
¡Magníficat!

Gloria a ti, Virgen María,
bendito siervo del Señor,
Madre de Dios,
Templo del Espíritu Santo!

¡Amén!

Novena a la Virgen de Lourdes

1. ORACIÓN A NS DE LOURDES

María, Nuestra Señora de Lourdes,
¡Que tu belleza y tu sonrisa refresquen nuestros corazones!
¡Que su apelación por la penitencia nos encuentre disponibles y generosos!
¡Que nuestras comunidades caminen decisivamente en el seguimiento de Cristo, y sin duda confíen en la fe de Pedro!
¡Que la manifestación de tu nombre, "la Inmaculada Concepción", nos haga esperar la inocencia redescubierta y la santidad del deseo!
¡Que la luz de Pascua, encendida al final de la Cuaresma venidera, reviva la llama de la caridad en nosotros!
¡Oh María, Reina de la Paz, mira a los pueblos víctimas de la guerra!
¡Oh María, salus infirmorum, concede fuerza y ​​esperanza a los enfermos!
¡Oh María, que viviste en la pobreza, ayuda a los más desfavorecidos a través de nosotros!
¡Oh María, Madre de la Iglesia, rezamos para que todos, como tú, sepan decir "sí" a las súplicas de Dios!
¡Oh María, Madre de Dios, llévanos a cantar el Magníficat porque el Reino de Dios está abierto para nosotros!

2. RECITANDO UN DIEZ DEL ROSARIO

3. DIGA LAS INVOCACIONES

"Nuestra Señora de Lourdes, ruega por nosotros"
"Santa Bernardetta, ruega por nosotros"
"Oh María, concebida sin pecado, ruega por nosotros que nos volvemos a ti"