Reflexione hoy sobre su disposición a imitar al apóstol Mateo

Al pasar Jesús, vio a un hombre llamado Mateo sentado en la aduana. Le dijo: "Sígueme". Y se levantó y lo siguió. Mateo 9: 9

San Matteo fue un hombre rico e "importante" en su época. Como recaudador de impuestos, muchos judíos no le agradaban. Pero demostró ser un buen hombre con su respuesta inmediata al llamado de Jesús.

No tenemos muchos detalles sobre esta historia, pero tenemos los detalles que importan. Vemos que Matteo está trabajando recaudando impuestos. Vemos que Jesús simplemente camina a su lado y lo llama. Y vemos que Mateo se levanta enseguida, lo abandona todo y sigue a Jesús, es una verdadera conversión.

Para la mayoría de las personas, este tipo de respuesta inmediata no sucedería. La mayoría de las personas primero deben conocer a Jesús, dejarse convencer por Él, hablar con familiares y amigos, pensar, meditar y luego decidir si seguir a Jesús fue una buena idea. La mayoría de la gente pasa por una larga racionalización de la voluntad de Dios antes de responder a ella. ¿Eres tú?

Todos los días Dios nos llama. Todos los días nos llama a servirle de forma radical y completa de una forma u otra. Y todos los días tenemos la oportunidad de responder como lo hizo Mateo. La clave es tener dos cualidades esenciales. Primero, debemos reconocer la voz de Jesús de manera clara e inequívoca. Debemos, con fe, saber lo que nos dice cuando lo dice. En segundo lugar, debemos estar seguros de que cualquier cosa que Jesús nos llame o nos inspire a hacer, valga la pena. Si logramos perfeccionar estas dos cualidades seremos capaces de imitar la respuesta rápida y total de San Mateo.

Reflexione hoy sobre su disposición a imitar a este apóstol. ¿Qué dices y haces cuando Dios te llama todos los días? Donde veas una carencia, comprométete de nuevo a un seguimiento más radical de Cristo. No te arrepentirás.

Señor, puedo escucharte hablar y responderte con todo mi corazón en todo momento. ¿Puedo seguirte a donde sea que me lleves? Jesús, creo en ti.