ROSARIO DE LA INMACULADA

En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Oh Dios, ven a salvarme.

Oh Señor, date prisa para ayudarme.

Gloria al padre

Invocación al Espíritu Santo

Ven, Espíritu Santo, envíanos un rayo de tu luz del cielo. Ven, padre de los pobres, ven, dador de regalos, ven, luz de corazones. Edredón perfecto; dulce invitado del alma, dulce alivio. En fatiga, descanso, en el calor, refugio, en lágrimas, comodidad. Oh luz bendita, invade los corazones de tus fieles interiormente. Sin tu fuerza no hay nada en el hombre, nada sin culpa. Lave lo que es sórdido, moje lo que es árido, sane lo que está sangrando. Dobla lo que es rígido, calienta lo que es frío, endereza lo que se desvía. Da a tus fieles que solo en ti confían en tus santos dones. Da virtud y recompensa, da muerte santa, da alegría eterna.

Credo

Creo en Dios, Padre Todopoderoso,

Creador del cielo y la tierra,

y en Jesucristo, su único Hijo,

nuestro Señor, quien fue concebido

del Espíritu Santo, nació de la Virgen María,

sufrió bajo Poncio Pilato, fue crucificado,

él murió y fue enterrado; el inframundo descendió;

al tercer día resucitó de la muerte;

subió al cielo, se sienta a la diestra de Dios

Padre todopoderoso

de allí vendrá a juzgar a los vivos y a los muertos.

Creo en el Espíritu Santo, la Iglesia santa.

Cattolica, la comunión de los santos,

la remisión de los pecados, la resurrección

de la carne, vida eterna.

Amén

Después de la primera parte del Ave María, por favor:

PRIMER MISTERIO

Por su Inmaculada Concepción sálvanos

SEGUNDO MISTERIO

Por tu Inmaculada Concepción protégenos

TERCER MISTERIO:

Para su Inmaculada Concepción guíenos

CUARTO MISTERIO:

Santifícanos por tu Inmaculada Concepción

QUINTO MISTERIO:

Por tu Inmaculada Concepción, gobernanos

Ejemplo:

Ave María llena eres de gracia,

El Señor y contigo.

Eres bendecida entre las mujeres

y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús

Por su Inmaculada Concepción, sálvanos.

Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros pecadores,

ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.

Al final de cada diez se agrega:

Mediador fiel, mediador de todas las gracias, ruega por nosotros.