¿Quieres obtener gracias especiales y victoria sobre el enemigo? Practica esta devoción

Promesa del Inmaculado Corazón de María: Todos los que honran el Corazón Más Casto de San José se beneficiarán de mi presencia materna en sus vidas de una manera especial; Apoyaré a cada uno de mis hijos e hijas, ayudándolo y consolándolo, con mi Corazón maternal, ya que he ayudado y consolado a mi casto esposo Joseph en este mundo. Y por todo lo que le pidan a mi Corazón con confianza, prometo interceder ante el Padre Eterno, Mi Divino Hijo Jesús y el Espíritu Santo, para que puedan obtener del Señor la gracia de alcanzar la santidad perfecta e imitar a Mi esposo José en las virtudes. alcanzando así la perfección del amor como lo vivió.

Jesús: Todos aquellos que honran el corazón más casto de mi virginal padre Joseph, recibirán la gracia en el último día de su vida y en la hora de su muerte, para vencer los engaños del enemigo de la salvación, obteniendo la victoria y la recompensa que mereces en el Reino de mi Padre celestial. Aquellos que honrarán devotamente este corazón más casto en este mundo, tienen la certeza de recibir una gran gloria en el Cielo, una gracia que no se otorgará a aquellos que no lo honren como les pido. Las almas devotas de mi virginal padre Joseph se beneficiarán de la visión beatífica de la Santísima Trinidad y tendrán un profundo conocimiento del Dios Triuno, las tres veces santas. En el Reino de los Cielos también disfrutarán de la presencia de mi Madre celestial y de mi virginal padre Joseph, así como de mis maravillas celestiales reservadas para todos ellos desde la eternidad. Estas almas serán queridas por la Santísima Trinidad y por mi Madre, la Santísima María, y rodearán el corazón más casto de mi virginal padre Joseph, como los lirios más bellos. Esta es mi gran promesa para todos los hombres de todo el mundo dedicados a mi virginal padre Joseph.

“Mi glorioso San José cuida a mi familia hoy, mañana y para siempre. Amén "(3 veces).
(Oración impartida por la Virgen María el 24 de mayo de 1996)

Sagrado Corazón de Jesús, Inmaculado Corazón de María y Muy Casto Corazón de San José, te consagro en este día (o esta noche) mi mente + mis palabras + mi cuerpo + mi corazón + y mi alma + para que tu santa voluntad se cumpla a través de mí en este día (o esta noche). Amén. En el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Amén.
(Oración enseñada al visionario Edson Glauber el 29 de diciembre de 1996 Día de la Sagrada Familia)